Empecé a poner hojas de laurel en el calentador. El truco occidental ahorra mucho dinero
¿Cómo aromatizar tu casa y limpiar el aire que hay en ella sin gastar casi nada? En el artículo de hoy le daremos una respuesta muy sencilla a esta pregunta aparentemente insidiosa.
Aromaterapia en tu propia casa
El olfato humano es un sentido muy sensible que a menudo no apreciamos. Los distintos olores, sobre todo los naturales y a base de hierbas, pueden influir mucho en cómo nos sentimos.
La aromaterapia se ha utilizado durante siglos para calmarnos, ayudarnos a dormir mejor o incluso para tratar diversas dolencias. Podemos quemar hierbas o plantas enteras, quemar aceites aromáticos o dejar que el humo o los vapores perfumados penetren en una habitación.
En una casa donde el aire está perfumado y purificado por el olor de las hierbas, respirarás mejor, dormirás mejor y, en resumen, vivirás más cómodamente.
Los aromas más utilizados en los hogares son la lavanda, la salvia o la hierba limón.
Laurel para calentar
La forma más fácil de aromatizar tu casa o apartamento es poner unos trozos de laurel directamente sobre el calefactor. Si el calefactor sólo calienta moderadamente, puedes ponerlo directamente sobre el radiador; si está funcionando a toda potencia, es mejor poner algo no inflamable debajo y dejar que se caliente. Por ejemplo, también puedes quemar hojas de laurel en una lámpara de aromaterapia como otras hierbas.
El aroma del laurel es antiestrés; además, su uso (por ejemplo, en forma de decocción) puede ser bueno para el aparato digestivo y aliviar la hinchazón o algunos problemas musculoesqueléticos. Incluso para uso interno, se dice que calma y ayuda a aliviar el estrés.
Hierbas caseras
También puedes aromatizar tu casa muy fácilmente cultivando hierbas en casa, que luego puedes utilizar en la cocina. La menta, la melisa, el tomillo o el romero son estupendas: harán que la habitación huela de maravilla y luego podrás utilizarlas para preparar especialidades sorprendentes. Muchas de estas hierbas también repelen los insectos, así que en verano no tendrás tantos visitantes indeseados.
Foto: Shutterstock